
Hay muchas personas, últimamente, que se han aficionado a comprar ropa casi nueva o de segunda mano. Son las cosas que ocurren cuando se atraviesa una crisis: cosas que antes la gente tiraba directamente a la basura o regalaba, ahora las venden, motivo por el cual han proliferado las tiendas a pie de calle u online que las ofrecen.
Y suelen ser prendas para niños o para adultos, de buenas marcas o fuera de catálogo e incluso a estrenar y que están en perfectas condiciones. Por lo general hay de todo y para todos los gustos o necesidades, con descuentos importantes y a precios realmente asequibles para cualquier bolsillo.
Yo, personalmente, me aficioné a la ropa de segunda mano en los años de Universidad, esto es, hace muchos años. Por entonces no había crisis, pero encontré en estas tiendas modelos increíbles, generalmente vintage (cuando el concepto no existía), que no podía conseguir en ninguna otra parte. Y el resultado es que iba siempre bien vestida, de manera muy original, tanto que llamaba la atención en el campus.
Es una forma de contribuir a que una prenda tenga una segunda vida, a reducir el consumismo y la sobre producción, a comprar por comprar.
Como os digo existen numerosas webs en las que puedes comprar pero también vender ropa que no usas:
Percentil: venden ropa casi nueva para niños. Abonan por adelantado por las prendas que ellos consideran que van a tener salida. Pero la ropa debe estar en perfecto estado.
Trastus: web de compra-venta o de intercambio. Recogen la ropa previa selección y te abonan solo una vez que la han vendido.
Grownies: su original idea es vender varias prendas de similar estilo en cajas que pueden intercambiar por una caja tuya.
Chicfy: en esta web venden ropa de mujer. Abonan una vez vendida la prenda, llevándose naturalmente su comisión. El envío se hace de vendedora a compradora.
Fuente
www.wikimums.com