
En nuestro día a día estamos acostumbrados a utilizar elementos que, por su familiaridad se nos hace muy difícil sospechar de ellos, pero algunos, como el plástico, contienen compuestos químicos que pueden llegar a ser peligrosos para la salud por provocar actividad hormonal que pudiera casar enfermedades, según ha advertido la OMS, Organización Mundial de la Salud.
La OMS ha llamado la atención sobre la necesidad de estudiar más a fondo los disruptores endocrinos. Unos compuestos químicos que se encuentran en multitud de productos que utilizamos a diario sin tener la más absoluta sospecha, como pueden ser los champús o las cremas o los plásticos que utilizamos para casi todo,entre otras cosas para envolver carnes pescados frutas y casi todos los alimentos que compramos en los centros comerciales.
Lo cierto es que según algunos estudios, algunos elementos pertenecientes al grupo de los disruptores endocrinos, como los ftalatos o el bisfenol, utilizados para dar elasticidad al plástico o las benzofenonas, presentes en los filtros ultravioleta de las cremas solares , son elementos que pueden simular el comportamiento de las hormonas, llegando a causar enfermedades relacionadas con el desarrollo metabólico.
Aumento de las enfermedades del sistema endocrino
Un equipo de 16 científicos de 10 países de Europa, Norteamérica, Asia y África han observado que la incidencia de las enfermedades del sistema endocrino han ido en aumento. Los científicos advierten sobre la evidencia de las consecuencias negativas sobre los procesos reproductivos y el aumento en la evidencia de los efectos sobre la glándula tiroides, el cerebro y las funciones metabólicas.
Estos elementos químicos están en muchos casos, según el informe, detrás de los problemas reproductivos y las complicaciones del embarazo, además de contarse entre las causas de muchos casos de obesidad, de ciertos tipos de cáncer y de problemas de desarrollo cerebral.
Uno de los sectores de población más afectados por este tipo de compuestos químicos son los niños y los fetos, especialmente sensibles a las disrupciones en los los desarrollos hormonales ya que sus cuerpos están aun en crecimiento, según los autores.
A pesar de la evidencia, sin embargo se plantea difícil determinar la lista delos disruptores endocrinos que se debiera eliminar, lo cierto es que hay más de 800 distintos y se desconocen los efectos que pudiera causar la interacción de dos o más de estos elementos entre ellos, según os científicos, este informe sólo ha puesto al descubierto la punta del iceberg.