El lector de libros electrónicos es la solución perfecta para los amantes de la lectura. Una biblioteca completa que puede llevarse en el bolso o la mochila y a la que se puede acceder en todo momento y lugar. Algunos permiten, incluso, hacer anotaciones y compartir con amigos los pasajes más interesantes.
Elegir el aparato que se adapte a las necesidades personales
En la adquisición de la tecnología es importante tener presente que los aparatos deben responder a las necesidades de sus usuarios y no han de ser estos los que se adapten a ellos. En el caso de la compra de un ebook pasa exactamente igual: los lectores que existen en el mercado responden a distintos tipos de exigencias y están pensados para perfiles de persona diferentes. Por eso es importante conocer cuáles son sus características más importantes y decantarse por el aparato que tenga las que más satisfacen las necesidades del comprador.
Las especificaciones a las que prestar atención
Entre sus múltiples características, los e-readers se diferencian en el tipo de pantalla. Las hay de tinta electrónica y tipo LCD. Estas últimas son también las que utilizan las tabletas y son ideales si el objetivo es aprovechar el lector para otras actividades. En cuanto a las de tinta, son perfectas para quien solo quiera el ebook reader para leer. También es un detalle a tener en cuenta la medida del aparato. Los más grandes pesan más y es probable que tengan baterías que se agoten antes. La pantalla es la que suele condicionar la medida final del lector. La estándar es de 6 pulgadas, aunque las hay que llegan hasta las 12.
Otras características a tener en cuenta
Es importante elegir un lector que cuente con una memoria de al menos 2Gb, aún cuando se limite únicamente a almacenar libros (algunos permiten reproducir archivos de audio y vídeo). La autonomía de la batería es un factor crucial y debe ser de un mínimo de 15 días. Lo ideal es que permita entre uno y dos meses de autonomía para que leer sea la ocupación prioritaria a la que dedicarse.