Cuando pensamos en fibra, habitualmente pensamos en la regularidad de nuestro sistema digestivo, pero la fibra es mucho más que eso. Si queremos mantener un vientre plano, es necesario combinar ejercicios y una buena alimentación. La ingesta de fibra habitualmente se hace mediante verduras, cereales integrales, verduras y legumbres, teniendo en cuenta esto ya nos haremos una idea que consumiendo fibra no sólo mejorará nuestro digestión sino que además nuestra dieta se hará más saludable si intentamos introducir en ella distintos alimentos que incluyen fibra.
La fibra no es un nutriente en sí misma, pero las comidas que hagamos para obtenerla suelen ser muy nutritivas y además de contribuir a una correcta digestión, mediante el consumo de fibra estaremos también ingiriendo enzimas que ayudan a asimilar mejor los distintos nutrientes.
Las comidas altas en fibra, nos aportarán una sensación de saciedad, con lo cual no cuesta tanto mantener una dieta en la que intentemos evitar las comidas muy copiosas. Además el vaciado gástrico se dilata en el tiempo y ralentiza la absorción de grasas y azucares de los alimentos, lo que contribuye a regular los niveles de colesterol y glucosa en sangre.
Consumir frutas, verduras, cereales o otros alimentos ricos en fibra durante el día tendrá un gran beneficio sobre nuestro cuerpo y nuestra línea. Pero cuando nuestra dieta no es la más adecuada, necesitamos un plus de fibra, o no podemos consumir una gran cantidad de frutas y verduras durante el transcurso del día podemos ayudarnos añadiendo fibra a nuestros yogures o en la bebida, probablemente la mejor opción es usar la fibra soluble deliplus, este suplemento alimenticio se obtiene directamente del trigo, sin arrastre de proteínas por lo que no contiene gluten y es apto para celíacos. Con una cucharada al día es suficiente para que nuestro cuerpo asimile las cantidad diaria recomendada de fibra. Para una mejor asimilación, es preferible consumir la fibra después del desayuno o durante la comida o la cena. Debemos evitar, eso sí, consumir fibra en ayunas, ya que si no tenemos nada en nuestro estomago, no hay nada que digerir y eso podría inflamar nuestro estomago.
Si introducimos fibra en nuestra dieta, rápidamente se notan los beneficios, nos costará menos mantener la línea o incluso bajar de peso si superamos el indice de masa corporal recomendado. Además las digestiones se nos harán menos pesadas, aunque en los primeros días tal vez se note con el estomago un poco hinchado esto es por la falta de costumbre y rápidamente deja de molestarnos.