Establecida como una joya preciosa a los pies de la Sierra Nevada, en las orillas de los ríos Darro y Genil, Granada es una antigua ciudad andaluza, famosa en todo el mundo por disfrutar de algunos de los más bellos conjuntos arquitectónicos de España. Estas maravillas son principalmente el resultado de diferentes dominaciones sucedidas en la zona, entre ellas la de la Granada nazarí con la que conoció su edad de oro, y que hizo de ésta una de las ciudades más prósperas de España.
Gracias a una rica y multifacética historia, ahora te puedes alegrar el espíritu a la vista de las grandes obras, como la Alhambra, el Generalife, el pintoresco barrio árabe del Albaicín, la Catedral Metropolitana de la Encarnación y de la Capilla Real, que alberga los restos de los reyes católicos.
Más allá de los grandes monumentos, la belleza de Granada, sin embargo, está en su cultura, que es también el resultado de la alternancia de diferentes poblaciones, cada una portadora de las diferentes costumbres y tradiciones. Para conocer la verdadera Granada, no sólo hecha de monumentos y palacios, sino también de gastronomía y costumbres locales, no te pierdas el barrio del Sacromonte, el reino de flamenco.
Más que una danza, el flamenco es una verdadera tradición que en el Sacromonte se puede ver continuamente porque se repite cada noche. El centro histórico de la ciudad, que una vez albergó en viviendas en pintorescas cuevas a la población gitana, alberga hoy los más hermosos espectáculos de flamenco en la ciudad.
Pero la Granada flamenca no se limita a un sólo antiguo y fascinante barrio. Al otro lado de la ciudad, en los tablaos (bares con actuaciones de flamenco en vivo), se puede, de hecho, asistir a inquietantes y evocadores espectáculos , que te llegarán hasta el corazón. Aquí, con una copa de buen vino, también puedes degustar suculentos platos típicos y tapas , de esta manera, disfrutar de la vista, el gusto y el oído, lo que es el corazón de la cultura en Granada.