
Son famosos los lunares de Marilyn Monroe o Cindy Crawford, tanto que algunas mujeres se lo pintan para ser más atractivas.
Sin embargo no todos los lunares o nevus deben ser mirados por su estética. Algunas marcas de belleza no son tales. Pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo y no solo en la cara, ser abultados, ser irregulares y muy grandes y tener pelos. Ocasionalmente aparecen en grupos y pueden tener formas y tamaños diferentes.
Qué son los lunares
En realidad los lunares son tumores benignos y son una acumulación de melanocitos, las células que dan color a la piel. A veces aparecen en el feto, otras veces aparecen en la vejez pero por lo general aparecen durante los primeros 20-30 años. Al llegar a los veinte años las personas suelen tener de 20 a 40 lunares por todo el cuerpo y suelen medir menos de medio centímetro. Los nevus congénitos en cambio pueden medir muy poco o cubrir todo el cuerpo, en cuyo caso se los denomina nevus congénito gigante, nevus bañador o nevus prenda según dónde esté situado. A pesar de ser congénitos no son hereditarios y surgen a partir del tercer mes de embarazo. En algunos casos desaparecen con el nacimiento.
Los nevus no distinguen el sexo ni la raza ni la parte del cuerpo de la persona en los que aparecen. Suelen ser marrones, de más claro a más oscuro, casi negro y parecen aclararse con el tiempo. No tienen ninguna función pero pueden ser síntoma de un cáncer de piel, cuando pasan a llamarse melanomas malignos o atípicos. Los signos son: ABCDE: asimetría, bordes irregulares, coloración variada (azul, negro o rojizo), diámetro mayor de 6 mm y elevación de su superficie. Es necesario prestar atención también a si crecen demasiado rápido, a si se siente picor o hay dolor o sangrado. En algunos países son mal signo los lunares que aparecen en las palmas de las manos, en la planta del pie y en las uñas sobre todo si presentan los signos antes descritos.
La exposición al sol, el embarazo o la pubertad pueden ser causa de que los lunares aumenten de tamaño, número y pigmentación, y aunque es normal, si se producen cambios, conviene consultar a un dermatólogo.
Los casos de melanomas han superado el 1800% a lo largo de los últimos 60 años. Algunos entendidos opinan que puede deberse a la exposición temprana al sol. Los expertos recomiendan el uso de protección solar durante todas las estaciones del año.