
¿Puede ser una experiencia liberadora para un adulto permanecer célibe durante años? Eso es lo que opina Sophie Fontanel, escritora y editora de la revista francesa Elle. Al menos eso es lo que se desprende de las páginas de su libro «The art of sleeping alone (why one french woman suddenly gave up sex)» -«El arte de dormir sola (por qué una mujer francesa de repente renunció al sexo)» que se espera sea lanzado al mercado español a final de año.
Sophie no habla de abstinencia ni de celibato, sino de «singularidad». Y su renuncia al sexo (de esto hace 12 años) fue por tener malas experiencias. Es una forma de protesta frente a un «mal polvo», frente a la obsesión por el sexo y al modo en que con ello se domina a la mujer. Pero entiende que su «singularidad» la puede mantener gracias a que es autónoma y a que es económicamente independiente, aunque cree que todo el mundo tiene el derecho a tomarse un respiro aun a pesar de que hay países en los que no existe esta opción, incluso si eres niño.
La decisión de decir «no» no le resultó fácil. Algunos la tomaban por grosera o mal agradecida. Pero la cuestión es, según Sophie, que si eres feliz con tu pareja, estupendo; pero no es tan estupendo si no eres feliz. Es entonces cuando hay que saber decir basta. Es muy difícil decir no cuando estás bajo el dominio de un hombre pero no lo es menos si eres libre.
Su libro, por otra parte, causa mucha curiosidad. ¿Se masturba? ¿Ha tenido orgasmos? A Sophie no le gusta hablar en esos términos que considera crudos, pero entiende que la gente quiera saber algo sobre su intimidad. La masturbación sigue siendo un tabú incluso más que el sexo oral.
Para Sophie si haces el amor con alegría, la cosa es fantástica. El problema viene cuando no eres feliz haciéndolo. Cuando en su revista publican artículos como esos en los que te dicen que cuanto más sexo tengas más bonita eres, le dan ganas de refutarlos y decir que es estúpido. No hacer el amor puede hacer que tu sensualidad se expanda hacia todo lo demás que hagas: escribir, nadar, deleitarte con un paisaje, pintar, desarrollar nuevos hobbies, disfrutar de una voz, de un sutil contacto… Según Sophie, lo importante es no dejarse llevar por estereotipos ni por normas. La pregunta es ¿tú también eres célibe? ¿Cómo lo llevas tú?