Entre un 30% y un 40% de las mujeres españolas mayores de 50 años sufre alopecia, según varios estudios. Obviamente, este problema, caracterizado por la pérdida anormal de cabello (más de 100 cabellos por día aproximadamente), no es tan acusado en las mujeres como lo es en los hombres. De hecho, el sector masculino es quien se lleva la peor parte en lo que a pérdida de cabello se refiere (se cree que uno de cada 3 hombres españoles sufre calvicie). Aún así, parece que ellos lo tienen más asumido y en el caso de las mujeres, sí que se trata de un problema que a menudo genera problemas de autoestima e insatisfacción con la propia imagen.
La alopecia no es una situación permanente
No obstante, se trata de una situación más habitual de lo que pensamos, que puede deberse a la edad o a problemas como el estrés. Sin ir más lejos, la propia Carolina de Mónaco, vivió un episodio de alopecia que le obligó a cubrirse la cabeza con pañuelos y sombreros durante unta temporada sin perder ni un ápice de su tan laureado glamour.
Contrariamente a lo que muchas piensan, no se trata de una situación permanente y existen varias soluciones que permiten volver a lucir una cabellera abundante y con volumen sin necesidad de gastar grandes cantidades de dinero. En este artículo te ofrecemos varias soluciones para volver a sentirte cómoda con tu cabello:
1. Injertos capilares: el injerto de cabello es una técnica innovadora y muy avanzada que consiste en obtener cabello de la zona posterior o lateral de la cabeza para luego, injertar ese pelo en la zona frontal o en las zonas más despobladas. Una de sus principales ventajas es la naturalidad, ya que el donante suele ser el propio paciente y, además, no deja prácticamente ningún tipo de cicatriz en la zona de donde se extrae el cabello.
2. Productos farmacéuticos: si tu problema no es aún muy grave, puedes recurrir a los productos farmacéuticos formulados específicamente para mejorar la calidad y la cantidad de cabello. Puedes encontrar un amplio abanico de productos y elegir entre el que mejor se adapte a tus necesidades y a las características de tu cabello.
3. Postizos y pelucas: aunque no es una solución permanente, mientras te planteas realizarte un tratamiento como el injerto capilar, siempre puedes recurrir a pelucas y postizos. Es una buena forma de probar diferentes estilos y de hacerte una idea de cómo quieres que sea tu pelo si algún día te decides por la opción quirúrgica.