
De acuerdo con una tradición de los años 30 los bebés de Finlandia duermen en cajas de cartón. Esto puede sonar extraño, pero se trata de una iniciativa del Estado que durante 75 años envía a las embarazadas de toda condición social, cajas de cartón con todo un paquete de ropa, sábanas y juguetes de manera tal que los bebés puedan aprovechar la caja a modo de cuco. Quizás sea el motivo de la baja mortalidad de bebés en este país.
La caja contiene monitos, sacos de dormir, ropa para el aire libre, productos para el baño, pañales y lo más importante, un colchón. Es así como esta estupenda caja se convierte en la primera camita de los bebés finlandeses, un modo de nacer de forma equitativa en todo el país.
Se puede optar entre recibir la caja o cobrar en efectivo, pero la cantidad en efectivo es mucho menor que si escogen la caja.
Empezó siendo una iniciativa para familias de bajos recursos pero esto cambió en 1947. La única condición es presentarte en una clínica prenatal pública para hacer una primera visita al médico antes de cumplidos los 4 meses de embarazo. Era pues la manera de inducir a las embarazadas a acudir a los servicios médicos de manera tal que el índice de mortalidad bajó de más de 70 por cada mil bebés a menos de 5. En la década de los 30 Finlandia era un país pobre pero la idea de la caja regalo mejoró sustancialmente la situación de las embarazadas y de los nacimientos cosa que une a varias generaciones de mujeres. Para éstas es un momento emocionante. Ir a la oficina de correos a recoger tu caja que cambia el estilo de las prendas y de los complementos cada año. Siempre es una agradable sorpresa.
Es que la caja incluye el colchón y fundas para el colchón, edredón, manta, o saco de dormir. Traje de nieve. Traje ligero encapuchado. Monos de punto. Calcetines, manoplas, pasamontañas y sombrero. Ropita en diferentes colores y estampados unisex. Toalla de baño con capucha. Tijera de uñas, cepillo para el pelo y estropajo para el baño. Pañales de tela, termómetro para el baño, crema de pelo y libros con imágenes y juguetes para la dentición. Parches para el pecho y condones. Los chupetes fueron retirados para promover la lactancia materna. Esto ahorra a las madres el hacer una investigación sobre lo que necesitan y les ahorra también las corridas a las tiendas. Dicen que en parte por la caja, que es realmente todo un símbolo de cómo el Gobierno cuida de sus ciudadanos, las madres finlandesas son las más felices del mundo. Yo no lo dudo.