
La felicidad no es un continuum. Es absurdo pensar que existen «tips» para ser feliz que sirvan a cualquier persona en cualquier circunstancia. Sin embargo cada vez hay más presión especialmente a través de los medios de comunicación y las redes sociales para que sonriamos todo el tiempo.
La vida no es jauja y tenemos derecho a sentirnos menos felices o más felices según el momento por el que estemos atravesando.
Pero los gurús de la felicidad y el pensamiento positivo no se dan por aludidos.
Algunos de esos tips dicen que no debemos vivir preocupados. No debemos vivir constantemente preocupados sino más bien encontrar soluciones para nuestros problemas. Pero un poco de preocupación es normal por ejemplo si estamos pensando en el futuro de nuestros hijos en un mundo que anda bastante mal.
Otro tip es que no hagas lo que no es de tu agrado. ¡Pero cuántas veces debemos hacer cosas que no quisiéramos hacer!
También se nos invita a no ser pesimistas. Pero hay quien dice que un pesimista es un optimista bien informado.
Luego te dicen que no hagas comparaciones. No ganas nada con compararte con tu colega o con tu vecino. Sin embargo hacer comparaciones puede ser un móvil para mejorar tu actitud o tu manera de desenvolverte.
Otros dicen que no sientas rencor. En eso estoy de acuerdo. Pero no guardar rencor no significa que olvides el mal que se te ha hecho y estés atenta a lo que pueda venir.
También te dicen que mantengas el control. Se refieren a que dejes de creer que quien controla tu vida es un factor exterior a ti misma. Lo cierto es que muchas veces no podemos controlarlo todo y que siempre habrá imprevistos.
En fin. Tú puedes pasarte la vida sonriendo pero la vida no siempre te sonreirá y deberás estar preparada para ello.