
Los investigadores de la Escuela Universitaria de Medicina de Washington en St. Louis han dado con las células en las que se produce el estado de reposo o redes de estado de reposo dentro de la materia gris y han podido sacar algunas conclusiones acerca de lo que ocurre en nuestras mentes cuando estas redes se activan y la mente «divaga».
A medida que envejeces sueñas menos
Soñar despierto es una forma de anticipar el futuro, por ello a medida que envejecemos soñamos menos porque el tiempo futuro se acorta.
Los jóvenes tienen ensoñaciones o fantasías de poder, suelen soñarse a sí mismos como superhombres, etc.
Soñar despierto hace que te olvides de lo que estabas haciendo
Si se te pide que te retrotraigas a algo de tu pasado lo más probable es que se te olvide lo que estabas haciendo momentos antes. El tipo de ensueño también afecta cuantitativamente al olvido. Esto es de interés especial en el caso de profesiones como la medicina. Si un médico acaba de memorizar la dosis de un fármaco y lo detienen para preguntarle acerca de sus vacaciones del mes pasado puede que olvide lo que acababa de memorizar.
Soñar despierto apaga algunas partes de nuestro cerebro, concretamente las partes que tienen que ver con la empatía. Si tu cerebro cognitivo está enfrascado en una tarea analítica exigente no tiene espacio para la la empatía aunque las distintas partes del cerebro tienden a rotar.
Lo que controla nuestros sueños es la mente, no el cerebro. Podemos decir que uno es el hardware y el otro es el software, como distintos aspectos de una misma cosa que fluctúa de forma natural.
Soñar despierto te hace ser más creativo
Cuando soñamos despiertos se produce una suerte de diálogo entre distintas partes de la mente de manera que accedes a información que estaba presuntamente adormecida. Esto da lugar a que podamos ser creativos, encontrar solucionase a problemas mediante respuestas que antes no habíamos contemplado.
Imagen: magdala-laciudaddelaalegria.blogspot.com